Aguacate de México: “Es una de las temporadas con los precios más bajos que hayamos visto”

Antonio Villaseñor, director general de Aztecavo e integrante del Directorio de APEAM, analiza el avance de la cosecha mexicana, las proyecciones de exportación, la presión interna sobre los precios y el hito del Super Bowl en una temporada marcada por altos volúmenes, fuerte competencia interna y un escenario de precios deprimidos

Con una cosecha que avanza a un ritmo similar al del año pasado, pero con un volumen significativamente mayor de fruta disponible, la temporada mexicana de aguacate Hass enfrenta uno de sus escenarios más desafiantes en materia de precios. El aumento de la oferta, la atomización de los exportadores y una estrategia comercial que no logró anticipar correctamente el comportamiento del mercado han generado una fuerte presión sobre los retornos.

En conversación con Avobook, Antonio Villaseñor, director general (CEO) de Aztecavo e integrante del Directorio de la Asociación de Productores y Empacadores Exportadores de Aguacate de México (APEAM), entrega a Avobook su visión sobre el momento actual de la industria y las claves estratégicas para recuperar mayor estabilidad en los precios.

– Según los datos que registra la Avobook, hoy parece que el porcentaje de avance en la cosecha total es similar a la que había igual fecha el año pasado. ¿Esto se prevé que siga así o va a cambiar su intensidad?

“Yo creo que en volumen vamos como un 14% más que el año pasado en fruta exportada. La estimación que hay de volúmenes es mayor que el año pasado, entonces yo creo que en este momento iremos alrededor de 40-45% de acuerdo a la estimación. Estimar un área del tamaño de Michoacán y Jalisco en términos de producción es una cuestión bastante compleja, pero cerrando a números redondos, vamos a tener una producción de 1.300.000 toneladas y se estima que exportemos 1.100.000 o un poco más. Habrá que ver en el transcurso del tiempo todos los factores que pueden ir afectando la producción y lo que pueda afectar la venta y la exportación hacia los Estados Unidos”.

– ¿Qué factores son los que pueden impactar en esa proyección?

“Vamos a entrar al invierno y puede ser una cuestión climatológica. Puede ser una cuestión de mercado, donde los productores prefieran enviar a un mercado nacional u otros diferentes. También hay algún volumen no menor de fruta que, por dejarla demasiado tiempo en el árbol esperando por mejores precios, se cae y prácticamente es un aguacate que se va a la industria del aceite, que es importante también. Se habla de hasta 100.000 toneladas por año. Es importante. Entonces hay factores que van a ir mermando un poco esa estimación”.

– ¿Y cómo se va a dar el cierre de año en Estados Unidos?

“México tiene un volumen importante. Las próximas semanas de fin de año son prácticamente días de fiesta, se baja la exportación y se retoma el volumen la primera semana de enero. Obviamente estamos preparándonos para el Super Bowl. Por eso, la segunda, tercera y cuarta semana de enero deberían ser muy importantes para poder abastecer ese hito del 16 de febrero”.

– ¿Esta situación de Michoacán es muy diferente en Jalisco?

“Jalisco empezó muy fuerte a inicio de temporada, o sea, los meses de julio, agosto, septiembre, el porcentaje era importante de Jalisco. Llegó a ser quizá el 30, 35% de cosecha en relación al volumen total. Ya los últimos meses se ha bajado al 10%, dejando el 90% en Michoacán. Entonces, en enero Jalisco prácticamente terminará y sólo se quedarán algunos productores con cierto volumen de zonas altas para terminar la temporada. Podemos decir que a partir de marzo el aporte de Jalisco será menor y dominará completamente Michoacán”.

– En cuanto a calibres, se ha visto el predominio de la disponibilidad de los calibres 48 y 60. ¿Eso se va a mantener hasta el Super Bowl o México tendrá más calibres para ofrecer?

“Los calibres 48 y 60 son los más comerciales que tiene el mercado de Estados Unidos, los que más consume. Y, en general, son los que más se producen en el mundo. En algunos países domina más de 60 y en otros el 48. Aquí en México normalmente domina el 48 y después le sigue 60. Seguirá toda la temporada con esa distribución de tamaños”.

– Otro fenómeno que observamos en Avobook es que los precios se han mantenido bajos en comparación a otros años. Además hay una brecha muy corta en el precio entre calibres. ¿Se espera un repunte en el precio o una separación más grande entre tamaños?

“Ha sido así una temporada completa. Sabemos que cada temporada es diferente. En esta en particular hemos visto que está muy aplanado el precio de toda la distribución de calibres. Incluso estamos a un precio muy cercano al mercado nacional. En años anteriores siempre estábamos un 30-35% por arriba en la fruta de exportación. Ha sido un año complicado. Yo creo que históricamente es una temporada donde hemos tenido los precios más bajos que hayamos visto”.

– ¿Estas condiciones de precio creen que serán temporales o es algo que llegó para quedarse?

“Yo creo que es una cuestión cíclica. En algún momento vamos a ver un repunte. Es complicado decir cuándo. Normalmente los precios en México repuntan o suben un poco más después del Super Bowl, hacia marzo, abril, mayo. Y eso tiene que ver con cómo estará distribuido el resto de la cosecha, que está en manos de productores de zonas más frías, que pueden planear más su cosecha. Eso pasa al final de la última parte de la temporada de México. Esto se puede repetir. Pero no creo que veamos precios similares al año pasado, que fueron casi récord, en niveles altos. Pero sí podemos tener mejores, en comparación a los que estamos viendo ahora”.

– ¿Cuál es el factor predominante que influye en este escenario de precios?

“Desde mi punto de vista, tiene que ver con el exceso de gente ofreciendo fruta en el mercado. Los programas siguen creciendo. Estamos viendo que el mercado está consumiendo más, un 10% promedio desde julio a la fecha, por mes. Estamos viendo que cada mes hay más fruta que se ha enviado, en el orden de un 10-12%. Pero si lo vemos en relación a los precios, están entre un 50% y un 60% abajo, respecto del año pasado. Entonces esa relación tiene que ver más con el número de gente ofreciendo fruta en el mercado. Creo que eso crea cierta inestabilidad”.

– ¿Eso pasa por el aumento del propio México, por encima del factor asociado a la presencia de otros orígenes?

“Sí, correcto. Realmente ahorita México tiene el 95 – 96% del mercado. No es una cuestión de competencia con otros orígenes, es prácticamente una competencia interna la que tenemos”.

– Varios actores de la industria mexicana advierten que hay más plantaciones que comenzara producir. Otras, están trabajando por mejorar las toneladas por hectárea. Por lo tanto, uno puede presumir que en los próximos años va a seguir aumentando la oferta y, por lo tanto, más efectos en materia de precios. ¿Es así?

“Es verdad que está creciendo la oferta en México. Darte un dato en este momento sería a lo mejor un poquito irresponsable, pero definitivamente la oferta está creciendo. Pero también es cierto que hay mercados que siguen aumentando su consumo. Estados Unidos todavía tiene espacio para crecer. Aunque, en el caso de Michoacán, creo que ya estamos en un momento en que el crecimiento prácticamente es mínimo, pero otras áreas sí están ampliando su producción”.

– Imaginamos que todos tratarán de encontrar su espacio en el mercado. ¿Existe una estrategia para no seguir impactando el comportamiento de los precios?

“Dentro de los puntos estratégicos que tiene la Asociación, el primero es que tenemos que dar certidumbre al mercado. Creo que México tiene la capacidad de abastecer el mercado todo el año y tenemos la ventaja competitiva que estamos. Entonces, es una parte que debemos mantener de una manera muy fuerte, con un soporte siempre con foco en los clientes. Es decir, México puede abastecer todo el año. Y la segunda parte es continuar con la promoción, hacer compromisos con los grandes clientes en Estados Unidos. Creo que eso nos debe dar la oportunidad de regresar a un nivel de precios más aceptables y que permita tener mejores resultados a toda la cadena”.

– ¿Existe coherencia entre el crecimiento de la producción de Hass de exportación y el consumo en Estados Unidos?

“Yo creo que sí lleva una correlación. El crecimiento de Michoacán y Jalisco sí tienen una correlación. Creo que éste es un año donde desafortunadamente la estrategia que tuvimos como origen México no fue la adecuada”.

– ¿En qué no fue la adecuada?

“En el verano, pensamos que iba a haber muy poca fruta para abastecer el mercado. Se dio esa información y obviamente los compradores o los grandes retailers no se pueden quedar sin fruta. Entonces, la buscaron anticipadamente en alguna parte, ya sea en Colombia o en Perú. Y eso creo que afectó el inicio de la temporada de México y se fue retrasando el volumen. Se fue haciendo una ‘represa ‘en volumen y, al final, eso también acabó perjudicando a la industria en términos de precio en Estados Unidos”.