Puerto de Santa Marta: un terminal que crece en el despacho de aguacates colombianos
Avobook conversó con Christian Castellanos, gerente comercial de Smitco, operadora de este terminal portuario, especializado en cargas refrigeradas, por donde pasa e 35% de los envíos de aguacates hacia Estados Unidos y Europa
El crecimiento veloz que está teniendo la industria exportadora de aguacates de Colombia ha llevado a los principales puertos de ese país a responder a las necesidades particulares que tiene el viaje de esta fruta a los mercados internacionales. Es conocida su experiencia en el negocio bananero y de flores. Sin embargo, el aguacate presenta cualidades que demandan desafíos logísticos especiales, que las empresas portuarias y las navieras están optimizando, para atender cada vez mejor a la industria.
Ése es el caso del Puerto de Santa Marta, terminal multipropósito, que además de contendores también maneja carbón, graneles sólidos y líquidos, vehículos, equipos petroleros y aceros.
Está operado desde hace 15 años por Santa Marta International Terminal Company (Smitco), compañía formada por dos empresas socias: la Sociedad Portuaria Santa Marta, que es el concesionario del puerto y se encarga de su administración; y SSA Marine, que tiene su casa matriz en Seattle, Estados Unidos, reconocido operador internacional de terminales portuarios.
Smitco administra, comercializa y opera el terminal de contenedores de este puerto ubicado entre La Sierra Nevada y el Mar Caribe Colombiano.
“Somos un puerto especializado en carga refrigerada”, explica Christian Castellanos, gerente comercial de Smitco, quien conversó con Avobook sobre cómo abordan los desafíos de la exportación de aguacates desde Colombia a los mercados de Europa y Estados Unidos.
Aguacates ya ocupan el tercer lugar entre las frutas exportadas
Según explica castellanos, Santa Marta está situado en el tercer lugar de relevancia en la red portuaria colombiana, detrás de Cartagena y Buenaventura. Mueve alrededor de 48.000 contenedores refrigerados de exportación y solo 5.500 son de cargas secas, lo que demuestra la especialización en el manejo de carga refrigeradas
Según las cifras recientes, el aguacate ya alcanza el tercer lugar dentro de la agroexportación colombiana desde este puerto, donde el primer puesto lo tiene el inalcanzable negocio de los bananos.
“El año pasado hubo una disminución en los volúmenes de carga para todos. Este año tiene otras cifras totalmente diferentes. Por ejemplo, en Banano son 40.000 contenedores, un poco más. Las flores, unos 2.000 contenedores, que equivale al 70% del mercado marítimo de flores. En aguacates, entre enero y octubre ya van más 1.500 contenedores”, explica.
En este escenario es que, desde hace unos cinco años, comenzó a hacerse más visible la exportación de aguacates, que viene creciendo de manera significativa en todo el país y, por añadidura, dentro de este terminal.
“Este año va creciendo en alrededor de un 20%. A fin de año nos anuncian unos crecimientos mayores por Santa Marta.
Las cifras son evidentes: al comparar septiembre-octubre de 2023 con el mismo periodo de 2024, se registra un aumento del 96% en la carga del fruto.
“En octubre del año pasado, se exportaron por Santa Marta 132 contenedores de aguacate. En octubre de este año, 257. Es un crecimiento bien importante, justo cuando se inicia la temporada de envíos a Europa que para nosotros es la más importante, entre noviembre y enero”, detalla.
Este centro de despachos se hace cargo de aproximadamente 35% de las exportaciones de aguacates de Colombia, pero el objetivo es crecer, mejorando algunas brechas que ya tienen identificadas.
Ventajas y desafíos en Europa y Estados Unidos
Christian Castellanos explica que Santa Marta es ideal para el negocio aguacatero, porque es el puerto más importante en despachos destinados al norte de Europa, con cuatro salidas semanales a ese destino.
“Tenemos a Maersk, Hapag Lloyd , Cma Cgm y Seatrade. Somos líderes en el mercado de exportación de refrigerados para Europa, por esa cantidad de salidas que tenemos a la semana”, comenta el gerente comercial.
El objetivo es reforzar los servicios para los exportadores de aguacates, para seguir creciendo. De hecho, en la comparación anual se evidencia la curva ascendente: el año pasado, entre enero y octubre, los envíos de aguacate al extranjero totalizaron un poco más 1.200 contenedores, mientras este año se cuentan más de 1.500 contenedores.
“Le hemos le hemos dado mucho acompañamiento comercial y operativo a ese mercado, que es nuevo. Colombia lleva exportando ya unos volúmenes interesantes hace cinco años más o menos y cada año viene con un crecimiento bien importante. Y estamos consolidando la relación con los exportadores, porque los destinos que está pidiendo el aguacate no son los que tiene regularmente el puerto de Santa Marta”, explica Castellanos.
Por ello, se están analizando alternativas que complementen los servicios actuales: “Estamos buscando una quinta naviera para atacar Rotterdam directamente. Hoy tenemos se ofrecen arribos a Amberes, en Bélgica, como alternativa. Muchos clientes han pasado de Rotterdam a Amberes. Entonces Santa Marta les funciona perfectamente y por eso es el crecimiento que se aprecia en las cifras”.
“Queremos que el exportador de aguacates puede escoger por un abanico de posibilidades cuál es la mejor opción logística, incluyendo puerto, naviera con sus tiempos de tránsito, tarifas de cada uno y que tengan más oportunidades para poder exportar. Pero tenemos mucho que trabajar en temas de logística navieros con el sector, para tener mayor participación del sector de aguacate, que es nuestra intención”, advierte.
Además de Roterdam, otro destino clave para el negocio aguacatero colombiano es Filadelfia, en Estados Unidos. También hay envíos hacia Miami, que está abordando sin problemas el puerto de Santa Marta.
“Hacia Miami, somos líderes nosotros, pero el volumen de Miami es menor en comparación al de Filadelfia, pero estamos en conjunto buscando mejores soluciones logísticas”, detalla Castellanos.
Aquí, el desafío es llegar directo hasta el puerto norteamericano, sin necesidad de trasbordos.
Para ello, el terminal se ha sumado a giras de los exportadores de aguacates, para hacer gestiones conjuntas que refuercen el comercio de este fruto desde Colombia.
“Por ejemplo, fuimos en conjunto a Atlanta a tocar las puertas de una naviera de refrigerados que no solo transporta su fruta, que es el banano que sale de acá, sino también están abiertos nuevas opciones. Pero es una naviera muy puntual, muy confiable, no se sale de itinerario y es dedicada al transporte de carga refrigerada. Fuimos juntos como sector aguacatero a explicarles cómo funciona el aguacate, hasta qué altura se llenan los contenedores, con qué peso neto, qué peso bruto de carga van, la ubicación exacta del destino final en Filadelfia. Para que ellos se lleven toda la información necesaria y traten de abrir esa ruta al aguacate, que es un “mercado nuevo”, comenta.
Los tiempos de viaje del aguacate desde Santa Marta
Actualmente, los aguacates que salen de Santa Marta demoran entre 11 y 18 días en llegar a Europa, dependiendo de la naviera y el destino específico.
En el detalle fino, Santa Marta cuenta con 4 salidas semanales a Europa Norte como principal destino del aguacate colombiano, con los mejores tiempos de tránsito. Dentro de las navieras, la que hace el menor tiempo a Reino Unido es de 11 días y a Países Bajos, el arribo es en 12 días, a la zona portuaria de Flushing (Vlissingen) y Amberes como alternativa de Rotterdam.
Mientras que, hacia Estados Unidos, los aguacates que salen desde Santa Marta son mayormente los destinados a Miami. Según explica Castellanos, es un servicio “que sale jueves el y llega el lunes. Entonces queda total disponibilidad de toda la semana al cliente para disponer de su fruta ahí, en destino”.
Hay otro servicio que viaja a Filadelfia, hasta donde demora 10 días, pero se hace un transbordo. Es un tiempo de tránsito que están buscando mejorar, para ser competitivos con los 5 a 7 días que tienen los Global Carrier desde Cartagena.
Especialización en cargas refrigeradas
Según explica el gerente comercial de este terminal portuario, los servicios disponibles para la industria aguacatera son muy diversos y con el foco puesto en lo tecnológico, no solo en las características de los contenedores, sino también en toda la logística complementaria, para minimizar los problemas que tradicionalmente se dan en la cadena de servicios.
En la elección del tipo de contenedor, el exportador es quien decide la tecnología que usará, dependiendo del destino de su fruta.
“Si son más de 10 días de viaje, normalmente se utiliza la atmósfera controlada. Menos días, se viaja en contenedores de atmósfera regular. Las navieras aquí en Santa Marta tienen los dos tipos. Por ejemplo, hacia Estados Unidos no todos requieren atmósfera controlada. Lo que va para Europa, el 100% la está utilizando”, detalla Castellanos.
Otro elemento diferenciador es la especialización de Santa Marta en cargas refrigeradas, lo que se ha materializado en el incremento constante de las conexiones y la existencia de infraestructura de primer nivel para cuidar la cadena de frío.
“Aquí todo el mundo se desvive porque el contenedor no se demore, que se trabaje bien. Y no solo el puerto, sino todas las autoridades trabajan en pro de que eso funcione bien. Todos saben perfectamente cómo afecta la demora de un contenedor o que no se conecte a tiempo y pierda la cadena de frío. Entonces todos vamos alineados con el mismo objetivo que es dar valor a esa carga y garantizar a que llegue a destino en las mejores condiciones”, señala Castellanos a Avobook.
En esa búsqueda, el recinto cuenta con el taller de contendores dentro de la terminal.
“En las otras terminales, las zonas de reparación de contenedores funcionan con terceros en otros patios fuera de las instalaciones. Tienen que sacar el contenedor, los clientes tienen que retornarlo y hay sobrecostos. Acá todo está en el mismo recinto”, explica el gerente comercial.
El año pasado, pasaron 50.000 reefers por el taller. En ese lugar, se garantiza la entrega del contenedor en óptimas condiciones, iniciando con un PTI (pre-trip inspection), con la revisión de la máquina, el lavado y la entrega a los exportadores de bananos, aguacates, flores o cualquier tipo de carga.
El terminal también reporta a la naviera los daños que puede tener el contenedor, lo que se puede intervenir en el taller, ubicado dentro del mismo terminal.
Además, Smitco tiene casi 1.500 conexiones para contenedores dentro del puerto y hay proyectos para aumentar esa capacidad. En 2023, se superaron las 3 millones de horas de conexión de refrigerados.
Con todos estos antecedentes, el terminal portuario de Santa Marta busca incrementar el negocio con la industria de los aguacates colombianos, aprovechando la curva ascendente que está exhibiendo y da señales de seguir en alza y para ello, en enero de 2025 duplicaremos nuestra capacidad instalada de cuartos fríos pasando de 4 a 8, que son indispensables para el llenado de los contendores y realizar las inspecciones de las autoridades garantizando la cadena de frio y la eficiencia en las operaciones.