Cada año, el Super Bowl no solo se consolida como el evento deportivo más importante de Estados Unidos, sino también como un fenómeno que marca tendencias de consumo. Uno de los productos que mayor protagonismo adquiere en esta fecha es el aguacate, cuyo consumo durante el evento alcanza cifras récord.
El aguacate, especialmente en forma de guacamole, es una de las opciones preferidas en las reuniones para disfrutar del Super Bowl. Según datos de la Asociación de Productores y Empacadores Exportadores de Aguacate de México (APEAM), durante las semanas previas al Super Bowl de 2024 se enviaron aproximadamente 110,000 toneladas de aguacate desde México hacia Estados Unidos, lo que representó un aumento significativo en comparación con años anteriores.
Por su parte, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) confirma que el aguacate es uno de los productos más importados desde México durante el primer trimestre del año, impulsado principalmente por la demanda generada en torno al Super Bowl.
Un vínculo consolidado entre el Super Bowl y el aguacate
La relación entre el Super Bowl y el aguacate comenzó a fortalecerse en la década de 1990, cuando la APEAM lanzó campañas promocionales dirigidas al mercado estadounidense. Estas estrategias, junto con la creciente popularidad del guacamole como aperitivo en eventos deportivos, contribuyeron a establecer un vínculo simbólico entre ambos.
Según datos del USDA, el aguacate mexicano ganó presencia en el mercado estadounidense tras la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en 1994, lo que permitió la eliminación progresiva de restricciones comerciales. Desde entonces, el Super Bowl se ha convertido en un motor clave que dinamiza la industria aguacatera, impulsando las exportaciones y el consumo interno.
El mercado de aguacates en las semanas previas al Super Bowl
Antonio Villaseñor, experto en el sector agroindustrial y director de Aztecavo, señala que la semana 4 de 2025 ha sido destacada, con un volumen de 35,739 toneladas, de las cuales se exportaron 30,712 a Estado Unidos, lo que representa un aprovechamiento del 86%. Según Villaseñor, los inventarios están a tope para abastecer las promociones del Super Bowl.
Asimismo, la disponibilidad de corte para la semana 4 asciende a casi 58,000 hectáreas, garantizando estabilidad en el volumen y la oferta. Sin embargo, la curva de tamaños sigue sin mejorar, con una mayor proporción de fruta mediana y pequeña de lo habitual. Villaseñor advierte: "Es crucial monitorear los cambios en la curva de tamaños y la demanda en las próximas semanas".
Por su parte, Sergio Paz, especialista en comercio de aguacates y gerente general de Coliman Avocados de México, destaca que las exportaciones de México a Estados Unidos han mantenido volúmenes elevados, con 1,576 embarques enviados recientemente. Esto ha permitido una recuperación progresiva de los inventarios en EE.UU., que han aumentado en casi 6,000 toneladas en la semana 4. No obstante, aunque la oferta se mantiene estable, el ritmo de ventas en el mercado estadounidense ha sido más lento de lo habitual, lo que ha reducido la rotación de inventarios a entre tres y cuatro días, cuando lo normal es de seis a siete días.
El guacamole: el protagonista indiscutible
Según la firma de investigación de mercado Nielsen, el consumo de aguacates en Estados Unidos se dispara en las semanas previas al Super Bowl, con niveles de venta hasta un 35% superiores en comparación con el resto del año. Esto se traduce en aproximadamente 3,000 millones de porciones de guacamole consumidas sólo durante el evento.

En cuanto a la producción, Michoacán, principal estado productor de aguacates en México, intensifica sus envíos a Estados Unidos en esta temporada. APEAM informa que cerca del 80% de los aguacates consumidos durante el Super Bowl provienen de esta región, lo que subraya la importancia de la industria aguacatera mexicana en el mercado norteamericano.
Sobre este punto, Antonio Villaseñor enfatiza: "Michoacán ha logrado consolidarse como el proveedor clave para este evento. La logística y la calidad del producto son fundamentales para mantener esta posición dominante".
Impacto económico en ambas naciones
El Super Bowl también genera beneficios económicos significativos para ambos países. En México, la exportación de aguacates en esta temporada representa un aporte clave al Producto Interno Bruto (PIB) agroindustrial. En 2022, las exportaciones de aguacate alcanzaron los 3,500 millones de dólares, de los cuales cerca de un tercio se concentró en las semanas cercanas al Super Bowl.
En Estados Unidos, las ventas al por menor de aguacates generan ingresos considerables para supermercados y minoristas. Según la Produce Marketing Association (PMA), la categoría de aguacates ha mostrado un crecimiento constante en las últimas dos décadas, impulsado en gran medida por eventos culturales como el Super Bowl.
Villaseñor destaca: "Este evento no solo beneficia a los productores, sino a toda la cadena de valor, desde los distribuidores hasta los minoristas en Estados Unidos. Es una sinergia comercial que se fortalece cada año".
Por su parte, Sergio Paz advierte sobre la dinámica de precios, indicando que, aunque la demanda sigue alta, algunos calibres han comenzado a mostrar cotizaciones más bajas en la frontera de Texas. "Es natural que los precios del aguacate mexicano se ajusten a la baja cuando los inventarios alcanzan niveles adecuados", explica. Sin embargo, señala que este año los precios podrían alcanzar máximos históricos debido a la fuerte demanda y al impacto del clima en ciertas regiones de Estados Unidos.
Aunque el mercado de aguacates se beneficia enormemente del Super Bowl, también enfrenta desafíos. La eficiencia en las cadenas de suministro es crucial para garantizar la frescura del producto, y la sostenibilidad es un tema cada vez más relevante, dado el alto consumo de agua en la producción de aguacates.
Para abordar estos retos, la industria ha implementado estrategias más sostenibles, como el uso eficiente del agua y tecnologías avanzadas en la producción. APEAM y otras organizaciones también han promovido campañas de concienciación sobre el consumo responsable.
Antonio Villaseñor concluye: "El reto es equilibrar el crecimiento de la demanda con prácticas responsables. La sostenibilidad ya no es una opción, sino una necesidad para garantizar el futuro del sector".
El Super Bowl es mucho más que un evento deportivo; es un catalizador económico y cultural que trasciende fronteras. Para la industria del aguacate, representa una oportunidad de crecimiento, pero también un llamado a innovar y adaptarse a un mercado cada vez más consciente y exigente.